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En 2023, la producción mundial de carne de cerdo alcanzó los 115 millones de toneladas equivalentes canal (tec), un aumento del 0.6 % en comparación con 2022. Este crecimiento de la oferta está vinculado a la evolución de China y Brasil, lo que compensa la caída europea. La demanda internacional cayó un -3.1 % anual.
En 2024, las perspectivas dependerán de la dinámica de los mayores productores (China, la Unión Europea, Estados Unidos y Brasil). Se espera una ligera caída de la producción mundial del -0.9 % interanual mientras que se prevé que la demanda sea mayor. Las perspectivas predicen una ligera caída en la oferta mundial de carne de cerdo impactada por la de China, con una recuperación moderada de la demanda internacional. Los actores europeos tendrán que competir con Estados Unidos y Brasil en un contexto de incertidumbres geopolíticas, sanitarias, comerciales, regulatorias y sociales.
Evolución de la cabaña de cerdas reproductoras en los principales productores mundiales a cierre de 2023/2022. Fuente: IFIP según Eurostat, MoA y USDA.
Unión Europea
En la UE-27, la encuesta ganadera de finales de 2023 prevé un posible fin de la descapitalización. En 2023, la caída de la oferta europea fue del 7.6 % de los cerdos beneficiados, o el equivalente a 17.3 millones de cerdos. El sector del beneficio y el despiece se ha visto afectado por una reestructuración que tiene consecuencias en el mercado. Estas reorganizaciones limitarán la producción europea a principios de año. En la segunda mitad se espera una mejora. En 2023, las exportaciones cayeron drásticamente: las ventas de productos porcinos a terceros mercados disminuyeron un 19 % en volumen. Además de la caída en la producción europea y la disponibilidad para la exportación, los precios muy bajos de la carne de cerdo al otro lado del Atlántico han hecho que la carne estadounidense y brasileña sea más competitiva a nivel internacional. A esto se sumó una desventaja monetaria para la UE: la fortaleza del euro frente al dólar y al real brasileño penalizó las exportaciones europeas de carne. En 2024, se espera que los exportadores europeos se beneficien de las oportunidades de mercado, particularmente en China, pero persisten desafíos de competitividad. Por el lado del consumo, la inflación debería disminuir.
China
En 2024 se espera una disminución de la producción porcina china del 3 %, según el USDA, debido a las dificultades en el mercado interno: epidemias de peste porcina africana y PRRS, y un año 2023 complicado para el sector porcino. A pesar de un comienzo prometedor para 2024, la fragilidad económica de China está obstaculizando la demanda interna, incluso durante los feriados nacionales. Una gran oferta ante una baja demanda provocó una fuerte reducción de los precios mientras que las granjas, con elevados costes de producción, dejaron de ser rentables. Por lo tanto, la industria porcina china ha sufrido importantes pérdidas económicas que han llevado a una reducción de la cabaña nacional de cerdas reproductoras a 41 millones de cabezas a finales de 2023, una caída anual del 5.6 %.
Para contrarrestar esta tendencia negativa, el Ministerio de Agricultura de China anunció un nuevo plan para regular la capacidad de producción nacional de carne de cerdo. El gobierno chino quiere estabilizar el número de cerdas reproductoras en 39 millones de cabezas, ajustando las cifras según la oferta y la demanda. Este plan prevé una mayor vigilancia del mercado y de las enfermedades, con un apoyo reforzado de las administraciones públicas. Se espera una recuperación de las importaciones en 2024 para compensar esta caída de la oferta.
Estados Unidos
Tras un año 2023 difícil para la industria porcina en Estados Unidos, para este año 2024 se espera una recuperación de la producción del 2.4 % según el USDA. La oferta debería verse estimulada por la demanda interna y las exportaciones. A pesar de los desafíos económicos, sanitarios y políticos, los analistas estadounidenses predicen una mejora de la producción gracias al aumento de la productividad y a una recuperación de la demanda. Teniendo en cuenta la disminución de los rebaños (-3.3 % de cerdas en diciembre de 2023/22), estas perspectivas del USDA parecen optimistas. Sin embargo, las carnes americanas deberían mantener su competitividad en el mercado global, con perspectivas de crecimiento en Centro y Sudamérica.
Brasil
Después de un buen año 2023, para 2024 se prevé un aumento de la producción, las exportaciones y el consumo. Beneficiándose de una reducción de los costos de producción tras la caída de los precios de las materias primas y de un mercado de exportación dinámico, el sector porcino brasileño continúa prosperando gracias a las inversiones de los fabricantes. Por tanto, las perspectivas para Brasil son buenas, con una mejora de la demanda interna y externa.
